jueves, 5 de noviembre de 2009

EL CAÑO DE SCHIARETTI


La falta de riego en la provincia de Córdoba parece haber llegado a la cabeza del gobernador y a algunos de sus funcionarios.
Y cuando digo riego, me refiero al agua, que tanto escasea en nuestra provincia, el riego de ideas parece estar ausente y sin vistas de hacerse presente.
Como cada vez que sucede algo en Córdoba, el gobernador no tuvo mejor idea que reaccionar con sus espasmos histéricos en lugar de intentar ponerse al frente de la búsqueda de soluciones.
Sucedió con el mal llamado “campo”, y cuando su conflicto con el gobierno nacional. Ante la situación bélica manifiesta, y ante la abrumadora cobertura que los “medios independientes” le brindaban a los productores sojeros, convirtiéndolos en una suerte de jacobinos rurales que venían con sus horquillas a cambiar el curso de la tiranía resultante de las urnas que ellos tanto desprecian, Schiaretti no tuvo mejor idea que enfrentarse al gobierno para ganarse el favor del sector agrario y de esta manera, tratar de legitimar su posición bastante maltrecha a partir de las denuncias de fraudes ventiladas por el inefable Luis Juez.
Y por si fuera poco, y solo para que vean el esmero que el gobernador le pone a la causa, les perdonó la última cuota del impuesto inmobiliario rural. Y en el 2009, para que vean lo tan, pero tan consustanciado que el gobernador esta con el dolor del pueblo sojero, el presupuesto del 2010, que prevé hasta un 25% de aumento en el impuesto inmobiliario urbano, no estipula aumento alguno para el inmobiliario rural.
Vean que gobernador! Siempre firme junto al pueblo.
Pero como no todo es soja, cuarteto y alfajores en la provincia de Córdoba, y en vista de lo mal, que según el gobernador le dejaron las finanzas provinciales luego de la híper jubilación otorgada masivamente cuando aun el era vicegobernador y no se daba cuenta de nada (pobrecito, es tonto o se hace?), nos amenazo a todos con sacar nuevamente bonos al estilo Lecor, todo para justificar ante nosotros su impericia en el manejo de la cosa publica y de paso, para amenazar a la presidenta.
Ahora falta agua. Y que fue lo único que se lo ocurrió a Schiaretti? Quiere poner un caño gigante para que nos traiga agua desde el río Paraná. Es posible? Vaya si es posible, los acueductos ya lo hacían los romanos siglos antes de Cristo. Es factible? Difícil, con los pocos recursos que cuenta la desastrosa administración Schiaretti y con la poco capacidad intelectual que muestran sus colaboradores, como el caso de Raúl Costa, al que los gringos le siguen talando la provincia (de 12 millones de hectáreas de bosques naturales a la provincia solo le quedan 600 mil, es decir perdió el 95% de sus recursos forestales) y el cree que lo va a solucionar soltando pájaros y llamando a la prensa adicta para que le festeje la ocurrencia.
Un Raúl Costa que siguió tomando sol en el Caribe cuando casi se incendia la provincia en el peor incendio rural que Córdoba recuerde.
Y no es antojadizo que todo esto suceda. Los agro-negocios exigen cada vez mas tierras para los cultivos transgénicos con el que se están enriqueciendo a la vez que destruyen el suelo provincial, esto hace que Schiaretti y Costa miren para otro lado mientras aniquilan la forestación, razón por la cual están convirtiendo a Córdoba en un desierto (y no es metáfora), ya casi no llueve y el calor incendia los pocos espinillos y árboles que nos quedan, el viento se encarga de avivar las llamas extendiendo el fuego y tornándolo inmanejable.
Cuando no, el viento levanta por el aire verdaderas cortinas de tierra, la visibilidad se hace escasa o nula, y se producen muertes en las autopistas y rutas de las provincias.
Pero en lugar de proteger el ecosistema, de poner fin a la tala y a recuperar los bosques perdidos, de cuidar el agua para que sea un bien social y no un elemento para el lucro de algunos, el gobernador quiere mandarse un caño… para que se entienda bien, quiere hacer un acueducto. Acueducto que los romanos hacían hace dos mil años, pero que parece inalcanzable para la lucidez e inteligencia de Schiaretti y cia.
E.C.

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