viernes, 13 de noviembre de 2009

LA RELIGION DE LA POLITICA


“El problema es que uno crece con la convicción de que los espejos devuelven fielmente nuestra imagen. Y sucede que alguna mano malvada comienza a fabricar espejos que deforman, y uno que siempre fue morocho, comienza a verse rubio y a asumir rubias conductas. Sencillamente porque desde chico nos dijeron que el espejo no miente. Por eso ha llegado el momento de desconfiar del espejo, y pensar que los fabricantes de espejos tienen intereses inconfesables que nosotros no conocemos, y a lo mejor hay que ver mas la realidad y menos el espejo, porque a veces ese espejo esta tendenciosamente modificado.”
Palabras más, palabras menos, con esta frase el genial Alejandro Dolina se refirió en el programa TVR a los medios de comunicación y su accionar.
Se me ocurre que esta metáfora también puede ser aplicable a la iglesia y su doctrina político-social y a algunos otros “hombres de fe” a los que tanto les agrada asumir el rol de opinólogos de la realidad cuando se topan con un micrófono.
En los últimos tiempos se viene observando por televisión a los monseñores Casaretto y Bergoglio hablar de la pobreza, corrupción o enfrentamientos en los que siempre el gobierno nacional es el actor principal de tales males.
En el momento que se debatía en la Argentina la Ley de Medios Audiovisuales, no tuvieron mejor ocurrencia que querer instalar el tema de la pobreza en un seminario organizado por la Escuela de Posgrado de la Ciudad Argentina (EPOCA) en el paquetisimo Hotel Alvear.
Lo que parece una incongruencia, es en realidad una perversidad. Hablar de tan delicado tema, en un lugar que es un símbolo de la opulencia y del capitalismo, ante personalidades tales como Roberto Dromi, Chiche Duhalde, Roque Fernández e Ignacio de Mendiguren que fueron artífices fundamentales en la aplicación del plan económico mas brutal que recuerde la historia argentina, y que condeno al hambre y la desocupación a millones de argentinos, es sencillamente una burla a aquellos marginados por el sistema.
Pero tranquilos, al igual que hicieron con Galileo, o como aun esperamos que hagan con sus responsabilidades en el apoyo a la dictadura de Videla y cia., o con su complicidad con el menemato, algún día pedirán perdón.
Por supuesto que no falto en dicha reunión el actual vocero de la ética y la moralidad en el país, me refiero al rabino Bergman, socio político de la “perdonable” Elisa Carrio.
Tal rabino que se presenta unido a Jesús y que se autotitula el heredero de Marshal Meyer, que figura entre los lideres de la fundación Hannah Arendt, pero que sus políticas en pos del liberalismo y de la liberalización sojera están mas cerca de Mancur Olson y los gurues de la escuela de Stanford y Chicago, no tiene empacho, cada vez que abre la boca, en postularse al premio Carlos Menem a la popularidad.
Tampoco le esquivan el bulto al hablar del “consenso”, palabra puesta de moda por quienes quieren imponernos los resabios de su agenda neoliberal. Para ellos el consenso no es discutir, expresar ideas, compararlas, debatirlas, así lo demuestran en el Congreso Nacional cada vez que no pueden imponer sus posturas. Para ellos el consenso es la aceptación total por parte del otro (en este caso el gobierno) de sus intereses, porque ellos, a partir de su autotitulada, autoconcedida y autoasumida autoridad moral están por encima de todos los seres vivientes, aun de los estados, como sucedía en la edad media hasta la aparición, entre otros de actores y situaciones que rompieron con la hegemonía papal como por ejemplo Nicolás Maquiavelo, el protestantismo o la Revolución Francesa.
De más esta decir que esta “autoridad moral” les permite asumir un poder de veto que nadie les concedió, pero que lo ejercen, con no poca aceptación entre la sociedad y la clase política.
así, podemos recordar la lucha que fue durante el gobierno de Raúl Alfonsín la implementación de la ley de divorcio, o lo que nos cuesta aun legalizar la unión civil entre personas del mismo sexo, y lo que ni siquiera se puede discutir, como por ejemplo, el aborto, la eutanasia, etc.
Y en tiempos que se ha puesto de moda criticar a Milagros Salas y su labor, alguna vez, se podrá comparar cuanto cuesta una casa de las realizadas por la agrupación Tupac Amaru y cuanto las que realiza Cáritas con el dinero del estado y asumiendo una conducta típica del clientelismo político?
Karl Marx sostenía que el verdadero estado cristiano no era otro que el estado ateo, ya que solo en ese contexto se cumplían los preceptos mas sagrados del cristianismo: la igualdad y la libertad, a la vez que garantizaba que nadie se podía erigir por encima de los otros miembros de la sociedad.
E.C.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Buenas: debo "confesar" a propósito de la primera nota que veo, la primera vez que abro esto del blog. que ahora que se me calmaron las arcadas al ver al "rabino y monseñor" juntos puedo exclamar: muy bueno esto del "blog" espero poder hacer uso, y bien, y bueno de él; pero arrancar con esos dos....solo falto a la cita fotogáfica Elisa Carrio (que no lilita, como se la pretende humanizar, cariñosamente en los medios opositores).
saludos, de K milo

Claudia dijo...

Jajaj profe... arcadas por el rabinito, que no es lo mismo que rabanito... me hizo reir!!
Esperamos verlo por aca...
Un abrazo
Claudia